Desgraciadamente hay que dejar las cosas claras. La evolución humana ha llegado a su máximo y estamos aplanando la curva de la misma. Ya no subimos, nos estancamos y empezaremos a caer. La estupidez humana contra todo pronostico, ha ganado. Lo han conseguido, somos imbéciles. Entre el Decathlon y las redes sociales nos han transformado en el homo idiota; Decathlon porque nos viste como mamarrachos para hacernos creer que vamos a ser campeones del mundo de alguna disciplina deportiva para la que no hemos nacido, y eso vestido con mallas de colores llamativos. Y las redes sociales pues ya se sabe; la fama y la riqueza sin esfuerzo, poetas de la cloaca y politólogos de inodoro. Y así el mundo sigue girando sobre su propio eje mientras nosotros volveremos al árbol para tirarnos piedra mientras buscamos hembras o machos para aparearnos enloquecidamente intentando que la especie no desaparezca, esta especie de idiotas rodeados de más idiotas.
A este paso un mandril nos enseñará matemáticas.
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